La primera edición de “Expo Vinos General Roca 2012” reunió una interesante cantidad de bodegas rionegrinas que pudieron exhibir sus productos ante un numeroso público, ávido de descubrir nuevos sabores embotellados. La muestra tuvo lugar en la ciudad de valletana y reunió además de las rionegrinas a bodegas de Neuquén, Mendoza, Salta, San Juan y La Pampa.
El partido de fútbol entre Argentina y Ecuador, que se jugó durante las primeras dos horas de apertura de la exposición, no fue motivo de ausencias. Desde temprano, mucho público concurrió a la muestra y después del 4 a 0 de Messi y Cía. el salón se colmó.
Martín Soria, intendente de General Roca, visitó la muestra y felicitó a los organizadores por la iniciativa. “Río Negro tiene una larga trayectoria vitivinícola y merece tener su exposición anual de vinos”, afirmó. Recordó que entre los años 1930 y 1950 la región contó con alrededor de 300 bodegas y que en la actualidad la cifra orilla las dos docenas. Dijo que hay que trabajar para consolidad el sector y para que nuevos y buenos vinos emerjan de los viñedos valletanos.
Al frente del equipo organizador se vio a Fernando Merino, socio gerente de la vinoteca roquense La Masía, presente en todos los detalles y amable anfitrión de la prensa. El salón lució bien ambientado, con cajas de vinos, barricas de roble y artículos de colección sobre el escenario y los stands en sus laterales y en una isla central. Esto permitió una cómoda circulación del público, inclusive con el salón lleno.
La bodega Agrestis concurrió con sus Pinot Noir y los espumantes, un clásico rionegrino. Se pudieron degustar el brut nature y el nature rose y se anunció para fin del 2012 la presentación del extra brut, con uvas gewürztraminer.
Uno de los stands más visitados fue el de la centenaria bodega Canale, referente de vinos patagónicos. Juan Garavito, alma mater de la empresa, no sólo presentó las dos promotoras más bonitas y descorchó sus excelentes vinos, también sirvió variados tragos con el espumante y rose, preparados a la vista por Miguel González y Eduardo Tigrino, expertos en coctelería. Un stand muy concurrido.
La bodega Chacras del Sol permitió degustar su vino Wünn Sol Naciente, Merlot 2007. Adalberto Fuentes Merari explicó que la cepa Merlot es la que más le gusta al dueño, un contador residente en Buenos Aires. La bodega de General Roca data de 2002 y también produce vinos Malbec, en su línea Wünn (sol naciente) y Konnantü (sol poniente).
Famili Pirri presentó una amplia variedad de sus productos, hasta cepas poco tradicionales en el Alto Valle, como es el Tokai Friulano. También se pudieron probar sus espumantes. Nos gustó la línea Viñas de Siracusa, en particular sus cuatro variedades blancas.
Marcelo Miras, quien trabajó con Raúl de la Motta en la bodega Canale, y luego con Michel Rolland en Fin del Mundo, concurrió con su marca propia y también con la línea Ocio. Los tintos de Miras son excelentes y el Reserva 2009 degustado, con Malbec, Cabernet Sauvi9gnon, Merlot y Cabernet Franc, de una selecta partida de apenas 2.000 botellas, resultó magnífico. Las uvas de estos vinos se seleccionan en forma manual una por una y el vino permanece 18 meses en barricas de roble francés y americano y luego 6 meses en botella, antes de su ingreso al mercado.
Particularmente atractivos para los que vivimos en la cordillera resultaron los vinos provenientes de la costa Atlántica, “vinos marítimos”. La bodega Océano presentó sus productos Mar, Ultramar, Don Atilio y Océano, con viñas cultivadas en la zona de Viedma. Son viñedos orgánicos. La línea Ultramar tiene cinco cepas (Cabernet Sauvignon, Merlot, Malbec, Pinot Noir y Sauvignon Blanc), varietales con crianza en barriles de roble y Don Atilio, un Malbec muy aromático. Océano Gran Reserva es más que recomendable, un blend trivarietal, que permite varios años de guarda.
Patagonia Valley fue otra de las bodegas destacadas. Ivana Lorena Pérez, a cargo de las ventas, y Jorge José Gallardo, enólogo, presentaron sus productos y muy buena folletería. En particular nos gustó su Gran Reserva 2008, con 18 meses de crianza en barrica, el producto ícono de la línea Rivus.
La Expo Vinos constituyó una buena muestra de los ejemplares rionegrinos. No obstante hay otros productos y es de esperar que estén presentes en la edición del año próximo. Al respecto, Fernando Merino, confirmó la segunda edición para la primera quincena de junio del 2013.
Un amplio mural señaló la ubicación de las cuatro bodegas que integran la “Ruta del Vino en Río Negro”: El museo La Falta de Cipolletti, Canale, Agrestis y Chacras del Sol.
Neuquén dijo presente con los vinos de las bodegas Fin del Mundo y NQN (del mismo grupo económico), Familia Schroeder y Patritti. Cuatro bodegas con variedad de productos y también vinos de alta gama.
Los vinos mendocinos estuvieron representados por las bodegas Escorihuela Gascón, Familia Zuccardi, Nieto Senetiner, La Celia, El Esteco; Salta por Etchart; San Juan por Graffigna y La Pampa por la bodega Del Desierto.
La única cervecería artesanal que concurrió al encuentro fue Berlina, de Bariloche, con Alejandro Hait, quien presentó sus tres variedades embotelladas, que tuvieron una buena recepción de los presentes.
Promediando la velada comenzaron a descorcharse varios vinos de alta gama, como el Arnaldo Etchart, el Cadus de Nieto Senetiner, los Marcus de Canale, el Malma Blend, el Special Blend 2007 de Fin del Mundo y el Primogénito Blend 2008 de Patritti.
La exposición contó asimismo con algunos stands de turismo, asesoramiento empresarial y la representación de los quesos y fiambres cordobeses que distribuye El Abasto. Ofrecieron unas bandejitas degustación que fueron el complemento ideal para los vinos.
Río Negro, una provincia en la cual se elaboran vinos hace más de un siglo, logró tener su exposición de vinos. Una buena iniciativa que promete consolidarse con el tiempo y ser junto a la ya tradicional y exitosa feria de vinos neuquina, en primavera, un clásico de la vitivinicultura argentina.