La sexta edición de Puro Vino BCH volvió a ser un éxito y centenares de personas colmaron los tres salones de Bariloche Eventos y Convenciones, donde tuvo lugar la feria. Asistieron importantes bodegas de Mendoza y Salta y muchas de Patagonia.
Cada bodega presento sus vinos más destacados ante los asistentes a la feria Puro Vino.
A partir de las 18 se habilitó el ingreso y después de las 21 el lugar orilló la plena ocupación. Como es tradicional, en el salón inferior se habilitó la barra para preparar tragos preparados por expertos barman y también hubo stand con Gin y vinos. El primer piso hubo stand con 23 bodegas y en el tercero tres puestos con productores de Río Negro, nucleados en el CREAR, y 26 bodegas. Entre ellas hubo muchas bodegas patagónicas, como Humberto Canale, Fin del Mundo, Malma, Del Desierto, Verum, Miras, etc.
Nicolás Noceti afirmó que la vitivinicultura patagónica pasa por un muy buen momento y tiene un gran potencial.
Nicolás Noceti, creador de Puro Vino junto con Rebeca Leal Díaz, se mostró muy conforme con el éxito de la edición 2023. “Puro Vino nació en Bariloche y tiene lugar en la Patagonia, por ello es lógico que participen las bodegas sureñas. Nosotros promovemos que esto sea así. La Patagonia esta pasando por un buen momento en materia de producción de vinos. Hoy ya no alcanza definir a todos los vinos sureños como patagónicos. Hay que especificar si son de San Patricio del Chañar, de Chos Malal, de la región de General Roca, 25 de Mayo, Trevelín o el sur de Chubut. Y las respuestas fueron positivas, asistieron bodegas de numerosas regiones”, explicó.
El Cabernet Franc, Desierto Pampa, de la bodega aledaña a 25 de Mayo, fue muy ponderado. En la foto, Miguel Angel Vallejos, de la bodega Del Desierto, junto a Tobías Allen y Ariel Cachazo, de la vinoteca local Cava Patagónica.
“Entiendo que Bariloche es un lugar con público ávido de este tipo de eventos. Y también participan residentes en las ciudades aledañas, como San Martín de los Andes, Villa La Angostura y El Bolsón. Participa mucha gente del sector hotelero gastronómico, que concurre a dialogar con los productores y entablar relación para hacer negocios. La gente ya sabe que en junio se hace Puro Vino. Hicimos cuatro ediciones, luego vino la pandemia, pero el año pasado volvimos y este año el evento se consolido”, detalló. Con respecto al Tasting evaluó que el nuevo formato fue positivo, ya que sumó 6 nuevos vinos. “De los 18 vinos presentados y degustados, 7 fueron patagónicos. Esto fue un respaldo importante a nuestro proyecto”, evaluó.
Julio Viola (h) dijo que las bodegas patagónicas deben evitar que la marca Patagonia sea registrada por un solo productor de vinos.
Durante la presentación de sus vinos en el Tasting, Julio Viola (h) , de la bodega Malma, convocó a “defender la marca Patagonia en los vinos». Dijo que “Patagonia es un nombre con un muy buen marketing, por ello es usado por grandes empresas internacionales. En materia de vinos es importante que nadie pueda registrarlo y que sea una denominación para los productores de la región».
Alex Heit presentó los dos vinos iconos de Canale: Barzi Canale y Dos Cielos.
Viola explicó que la defensa del nombre Patagonia fue iniciado por la bodega Canale, la pionera de la región, y hoy muchas bodegas sureñas colaboran en ello. “Debemos mantener limpio el nombre Patagonia en el mercado de los vinos”, afirmó. Dijo que esto exige estar atento, para evitar que alguien se lo apropie.
Julio Viola (h) en el stand de Malma durante la feria de vinos.
También reconoció que hay “muchas regiones vitivinícolas en la Patagonia. San Patricio del Chañar es una de ellas, donde nosotros comenzamos a elaborar vinos en 1999. Mi padre fue uno de los pioneros, con la bodega del Fin del Mundo. Fuimos creciendo como consumidores y productores de vinos. Tuve la suerte de poder aprender con grandes enólogos, como son Michel Rolland, Roberto de la Mota y Marcelo Miras”, indicó.
Eduardo Schiebel, sommelier de Brasil, graduado en vinos en España, dirige la vinoteca Cava Patagonica en la Galería del Sol.
Julio Viola comenzó a plantar viñedos en 1999, en el marco de un ponderado proyecto político del gobernador Jorge Sobisch, quien promovió el desarrollo de la vitivinicultura en San Patricio del chañar. Para ello, con recursos provenientes del petróleo, otorgó numerosos créditos a los empresarios interesados en plantar uvas y envasar vinos. Varios emprendimientos de concretaron y son exitosos, pero también hubo créditos dudosos y proyectos que nunca prosperaron. El vaso medio vacío tuvo mucha más prensa y protagonismo que el vaso medio lleno.
Los vinos elaborado por enólogas y bodegueras de Salta fueron muy ponderados por los asistentes a Puro Vino.
Los Viola crearon la bodega del Fin del Mundo y los Schroeder Malma. Posteriormente los Viola también compraron la bodega Malma y en 2009 se asociaron con los Eurnekian en el Holding Corporación América para operar ambas bodegas. La sociedad duró hasta 2019 cuando los Viola se retiraron y solo administran la bodega Malma.
Erardo Curcio, representante local, y Gastón Peppa, gerente Comercial de Interior, asesoraron a los asistentes al stand Rutini, de la bodega La Rural.
