El segundo festival “Cocina de Los Lagos” confirmó el interés que despiertan los festivales de gastronomía y centenares de personas se agolparon para disfrutar los productos preparados por una veintena de cocineros. Participaron profesionales regionales y también chef invitados de otras ciudades argentinas y del exterior. En el acto central se asaron corderos y pavos y alrededor de 300 kilos de langostinos.
“Las ferias de gastronomía se han consolidado como una nueva opción para disfrutar del tiempo libre, hacer turismo y probar comidas ricas con productos típicos”, resumió Hernán Gipponi, uno de los chef estrella invitados al festival, distinguido como el mejor de Argentina en el 2013, por la Academia Argentina de Gastronomía.
Hernán viajó con su familia, cocinó en el stand, participó de la preparación del almuerzo solidario y también tuvo tiempo de conocer productos y restaurantes locales. “La pasamos muy bien y el festival resultó un éxito. Tuve oportunidad de conocer mucha gente y con los cocineros trabajamos pero también nos divertimos”, señaló. En particular destacó la importancia que la gastronomía tiene en el turismo, pues “hoy en día la gente elige un lugar por lo que va a ver pero también por lo que podrá comer”, dijo. Recordó que esto fue promovido desde el ministerio de Turismo de la Nación y también se lo impulsa en algunas provincias. “Chubut es una provincia que une mar y montaña y tiene una gran variedad de muy buenos productos gastronómicos”, evaluó.
La segunda edición optimizó las propuestas del primer evento. En este sentido, las actividades se concentraron en la plaza central de Lago Puelo, donde se armaron los stands de cocina, la feria artesanal y regional, las clases de cocina y el almuerzo solidario con preparación a la vista. La organización estuvo a cargo de Mavy Jaichenco, secundada por Pablo Soto y una docena de cocineros radicados en la Patagonia. El evento coincide con el aniversario de la fundación del pueblo y ello moviliza a los lugareños y atrae a vecinos y turistas. Silvia Valdemoros, otra de las cocineras invitadas, colaboró en todo y en ocasiones condujo el evento.
En los stands se pudo degustar varias especialidades y también compartir un momento con cocineros de trayectoria y popularidad nacional, como Hernán Gipponi, Danilo Ferraz, Ricardo Belfiore, Daniel Ferrada o Pedro Misari Artica, quienes cocinaron en vivo.
Como bebida oficial del evento quedó confirmado el vino de San Rafael, Alfredo Roca, cuyo propietario volvió a estar presente y animó cada una de las reuniones. Junto a su representante en la Patagonia, Anibal Muñoz, deleitaron a los asistentes con los ricos tintos, blancos y espumantes elaborados en Mendoza.
Alejandro Maglione, periodista del diario La Nación, también premiado por la Academia Argentina de Gastronomía, se mostró muy conforme con la propuesta y también confirmó que volverá a la región del Nahuel Huapi cuando se repita el festival Bariloche a la Carta.
Los langostinos del mar Atlántico resultaron nuevamente deliciosos. Compartieron el menú del almuerzo a beneficio de los bomberos voluntarios y el hospital de Lago Puelo con los corderos y pavos y fueron preparados con aceite de oliva, ajo y mostaza regional. Servidos en bandejas, cada porción orilló los 300 gramos de rica comida. Luis Calderón, empresario patagónico que los distribuye, confirmó que los frutos de mar lograron ganar espacio en la mayoría de las cocinas. “Pese a que los argentinos somos bichos carnívoros, los pescados y mariscos también forman parte de la mayoría de las cartas, en especial en los buenos restaurantes”, dijo.
En la feria gastronómica y artesanal hubo de todo y para todos los gustos. Cervezas artesanales Huemul y Araucana, productos ahumados, tartas y tortas con frutos finos de la región, panes caseros, quesos artesanales, y una gran variedad de artesanías permitieron satisfacer el interés de los visitantes. También había escabeches, huevos de codorniz, dulces, miel, verduras orgánicas, helados y también probamos el nuevo chocolate con lúpulo, un nuevo producto de la cerveza artesanal Huemul.
