Que los cocineros de dos cervecerías sean los vencedores de la ronda barilochense clasificatoria al Torneo Nacional de Chef sorprendió ante el veredicto del jurado, integrado por tres destacados chef cordilleranos. Pero más sorprendió que superaran a cuatro establecimientos cuyas cocinas figuran entre las mejores de la región del Nahuel Huapi: los hoteles El Casco y Villa Huinid y los restaurantes de Pablo Quiven, ganador del Torneo Nacional de Chef 2022.
El plato de Quiven Patagonia lució fantástico.
Para ser sinceros, VG figuró entre los sorprendidos, ya que la técnica y presentación de los platos realizados por los cocineros de Madurado y Quiven Patagonia fue excelente. Pero obviamente no los probamos. El jurado, integrado por Julieta Marmorato (Bariloche), Mavy Jaichenco (Lago Puelo) y Federico Sastre (Bariloche) no dudó al momento de proclamar los ganadores.
Julieta observa el trabajo de los cocineros de Lowther, que obtuvieron el 2do premio.
En diálogo con VG Julieta explicó que varios platos que lucieron muy lindos no cumplieron con otras pautas del concurso. “A nosotros también con sorprendió que ganen los equipos de las cervecerías, pero hay que destacar que ellos cocinaron platos de restaurante, platos de concurso y ambos fueron muy bien elaborados”, dijo. Recordó que en un concurso de cocina se deben respetar estrictamente las reglas, ya que de lo contrario se obtienen puntos en contra. “No se puede llevar productos pre cocidos, y si se piden 2 salsas, no se puede presentar un plato con 1 o 3. Tampoco se puede entregar un producto sin la temperatura ideal ni la cocción necesaria», señaló.
Julieta Marmorato y Federico Sastre, integrantes del jurado.
Marmorato dijo que en los concursos se permite usar la mejor tecnología y por ello se permitió el uso de los thermomix, que no obstante fueron usados solo por 2 equipos. “Se evalúa el orden en que se cocina, la coordinación entre ambos cocineros y la elaboración de los platos. Es lógico que alguien se ponga un poco nervioso pero no debe perder la prolijidad, la buena técnica y el orden en cocinar” señaló.
El plato de Batistin, preparado con carne de bondiola.
Los participantes cocinaron por turnos, con dos equipos preparando los platos en forma paralela, con una diferencia de 30 minutos, ante la vista del jurado y los asistentes. En primer lugar, lo hicieron Batistin, con Braian Dillón y Luciana Laciar y Lowther, con Matías Rubilar y Sergio Peralta.
Braian Dillon y Luciana Laciar, del hotel Villa Huinid.
Batistin, cuya cocina se encuentra bajo la dirección general del chef Alejandro Clausen, es uno de los mejores restaurantes de hotel de Bariloche. Su cocina es excelente y obtuvo numerosos premios en el marco de Bariloche a la Carta, el festival de cocina que tiene lugar cada año en octubre. Alejandro entrenó a los cocineros participantes y también asistió a su presentación del torneo.
El plato de Lowther, que obtuvo el 2do premio
Por su parte, Rubilar y Peralta cocinan en la cervecería Lowther, que dirige el Gringo Lowther, que siempre se caracterizó por tener buena gastronomía. Tienen su local principal en la avenida Diagonal Capraro de Bariloche y una sucursal en la planta fabril, en Dina Huapi. Cocina rica, simple pero muy sabrosa es la receta infalible de sus platos. En el segundo turno cocinaron Vanesa Alvarado y Agustín Aliano, de la cervecería Belek, emplazada en el barrio cervecero. Es un local muy pequeño. pero con un propietario que es sinónimo de la exitosa gastronomía local. Julio Caregnato administró durante años Wilkenny, el célebre pub que marcó una época en la noche de Bariloche. Luego creo Trentis, otro ícono de la buena mesa (donde actualmente está Almado), y Kostelo, en Costanera y Quaglia, entre otros. Todos hitos de la buena mesa. Belek gano en Bariloche a la Carta y ahora repitió en el torneo Nacional de Chef. Sin palabras.
Jonatan y Kevin son hermanos y cocinan en Quiven Patagonia.
En el lateral derecho de la sala cocinaron Kevin y Jonatan Guichot, cocineros de Quiven Patagonia House Kitchen, uno de los mejores restaurantes de cocina de autor de Bariloche. Pablo Quiven, premiado y ganador de los Torneos Nacionales de Chef, donde también supo ser jurado, asistió en la preparación a sus cocineros. También llevaron un excelente equipamiento para cocinar y preparar los platos, incluidos dos thermomix. Fueron los candidatos a la victoria.
Andrés García y Marcelo Ferreyra, de El Casco.
En el tercer turno cocinaron Andres Garza y Marcelo Ferreyra, del hotel El Casco, otro icono de la buena mesa local. Su cocina siempre fue excelente, con chef de la talla de Fernando Trocca, Martín Erkekdjian, Ana Lucía Arias y Gabriel Salinas, quien es el chef local. Prepararon un vistoso plato, pero se excedieron en el tiempo estipulado para entregarlo terminado.
Milka Iglesias y Rodrigo Carballo fueorn los cocineros más jóvenes.
En la otra mesada cocinaron Milka Iglesias y Rodrigo Carballo, cocineros de Madurado, el restaurante de carnes que dirige Pablo Quiven en las instalaciones del Club de Regatas, en bahía Campanario. Con 25 años cada uno, fueron los cocineros más jóvenes del presente torneo. Prepararon un vistoso menú, demostrando muy buena técnica de cocción, pero no lograron convencer al jurado.
El plato de Madurado incluyó carne de bondiola y una muy buena presentación.
