En la décima edición de Vinoandino cuatro vinos patagónicos fueron distinguidos con medallas. El Special Blend, cosecha 2006, de la bodega Del Fin del Mundo, obtuvo uno de los premios más importantes: una medalla gran oro. En la categoría “aromáticos” recibió una medalla de oro el Malma sauvignon blanc, cosecha 2011, Finca La Papay, bodega NQN, de Viñedos de la Patagonia SRL. La bodega Del Fin del Mundo también recibió una medalla de plata por su reserva malbec 2008 y también obtuvo plata la bodega Mantra, de Delta Este SA, por su malbec roble 2008.
La X edición del Concurso Internacional de Vinos y Bebidas Espirituosas de Origen Vínico (Vinoandino) se desarrolló en las provincias de La Rioja, San Juan y Mendoza, del 9 al 17 de septiembre. Fue organizado por el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) y el Consejo Federal de Inversiones (CFI). El evento es considerado el más importante del hemisferio sur y en esta edición reunió un total de 730 productos, de bodegas de 12 países.
El concurso solo entregó 3 grandes medallas de oro. Dos tuvieron lugar en la categoría “vinos blancos, rosados y tintos de cepajes no aromáticos y espumantes”, considerada la más importante. Además del Special Blend neuquino fue premiado el vino Mil Vientos, un cabernet sauvignon 2009, de la bodega Merced del Estero, de San Juan. En la categoría “vinos licorosos” la única medalla fue para un vino de Rumania, el “Lagrima Lui Ovidiu”, de Murfatlar Romania S.A.
La cosecha 2006 del Special Blend envasó 102.895 botellas, con un 27 % de uvas merlot, un 35 de malbec y un 38 de cabernet sauvignon. Tuvo una crianza en roble francés de 15 meses y el porcentaje alcohólico es el 14 por ciento. Este vino Premium de la bodega neuquina se destaca por su color rojo púrpura, y su intenso aroma a frutos rojos, con notas de coco, chocolate y tabaco. En boca, se presenta frutado, sedoso, equilibrado, sensual, con palpables taninos suaves. Es un vino muy elegante con un extraordinario final de boca.
También se entregaron 79 medallas de oro y 142 de plata. En los oros 61 medallas fueron para la categoría “vinos blancos, rosados y tintos de cepajes no aromáticos y espumantes”, cuatro para los “vinos caseros y artesanales”, y tres para los vinos “licorosos y bajo velo”. Entre las ”bebidas espirituosas de origen vínico” Perú se llevó 5 oros por sus piscos, 3 medallas se entregaron a vinos aromáticos, dos para los “naturalmente dulces y mistelas” y en la categoría “vinos de todos los días” solo se entregó una.
Vinoandino reorganiza cada dos años y es patrocinado por la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) y la Unión Internacional de Enólogos (UIOE). Es miembro fundador de la Federación Mundial de Grandes Concursos Internacionales de Vinos y Espirituosas (VINOFED).
El presidente del INV, Guillermo García, se comprometió a profundizar «la federalización» iniciada este año con el certamen para «ir más al sur y más al norte» en la programación de Vinandino 2013, incluyendo a las provincias de Neuquén y Salta.
Por su parte Julio Cesar Vitale, en representación del ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, puso de relieve las políticas nacionales instrumentadas para el desarrollo de las economías regionales y afirmó que el Plan Estratégico Vitivinícola (PEVI) es un claro ejemplo de la Argentina «del desarrollo local y la generación de empleo».
También presentó el isologo “Vino Argentino – Bebida Nacional” con el que el producto ha sido distinguido por el ministerio, que podrá incorporarse en cualquiera de los elementos que constituyen el vestido de los diferentes envases, tanto para el mercado interno como para la exportación. La utilización es voluntaria y será controlada por el INV.
