Las cálidas temperaturas de la temporada y la visita del reconocido chef internacional Darío Gualtieri a la región del Nahuel Huapi alentaron a un grupo de destacados cocineros locales a cruzar las aguas del río Limay, para pasar un día de descanso y charlas culinarias en el Valle Encantado, a unos 60 kilómetros de Bariloche.
La iniciativa nació en “Visión Gourmet” (VG) y tuvo la inmediata aceptación de Carol y Jorge Pinto, propietarios y administradores del lugar quienes cedieron las magníficas instalaciones de su complejo turístico. El también chef y asesor de VG, Richard Oyarzun, se sumó con entusiasmo a la idea y aportó los costillares de cordero que serían la base del menú. El tercer ingrediente fundamental de un asado, un buen vino, corrió por cuenta de Marcelo Mega, quien aportó los varietales “Tierra de Luna”, de la bodega mendocina Francois Lurton.
Como es de imaginar la propuesta fue muy bien recibida por los cocineros barilochenses y amigos de Darío y la concurrencia superó las expectativas más optimistas. Alrededor de cuarenta personas cruzaron el río Limay para disfrutar del sol, el impactante entorno natural y buen clima que caracterizan a Valle Encantado.
En horas del mediodía, los cocineros “invadieron” la cocina del lugar, donde prepararon un aperitivo, variedad de ensaladas y amasaron pan, que se cocinó en el horno de barro. La carne fue asada en el mítico quincho de don Federico Van Ditmar, por Pablo, parrillero del predio.
Gustavo Goglino, Felipe Aguirre, Richard Oyarzun y Paula Peris.
Concurrieron los amigos y ex compañeros del Llao Llao de Darío, Felipe Aguirre, José Ferrer y Mauro Trinarolli; Claudio Seballos, de Tinto Bistró; Cristina y Philippe Baguette, de El Francés; Eduardo Holloway y Sebastián Stoveken, de Butterfly; Adrián Alonso, Octavio “Tata” Fagunden, Gerónimo Romero y Paula Peris.
También asistieron Diego Freixa, quien sirvió los vinos de Lurton; Gustavo Goglino, de la Guía Sabores; el fotógrafo y reportero gráfico Alfredo “Chino” Leiva; Marcelo Mega y Hugo “Chino” Olivera, quienes concurrieron desde Villa Llanquín con sus camionetas 4×4 (en las cuales cargaron el vino) y Luz Rapoport, quien presentó sus cortos sobre “malezas” comestibles, del escritor local Eduardo Rapoport, en donde se explican sus características y el uso que se hace de ellas en la gastronomía de la ciudad.
Como es fácil imaginar, el tema central de las charlas giró en torno a la buena mesa, nuevos proyectos, los vinos y la temporada gastronómica junto al Nahuel Huapi. También hubo tiempo para ponderar los vinos “Tierra de Luna”, conocidos por la mayoría de los cocineros y chefs, ya que forman parte de las cartas en numerosos restaurantes.
Se sirvieron los malbec y cabernet sauvignon cosecha 2008, los tintos de la serie, que también se envasa en botellas con las cepas chardonnay y vino rosado.
Las cálidas temperaturas de la jornada permitieron que el almuerzo fuera servido al aire libre, en las mesas ubicadas frente al quincho y los exquisitos postres, que llevaron varios cocineros y que prepararon en sus restaurantes.
Otro de los cortos proyectados, expuso lo que es el “chef extrem”, un encuentro deportivo gastronómico que a principios de abril tendrá su avant premier en el Valle Encantado y en el cual tendrán oportunidad de participar todos los referentes de la gastronomía local.
Oyarzun, quien promueve la idea hace varios años, resumió la filosofía y el espíritu del evento, que rápidamente ganó consenso entre los presentes. Es una competencia por equipos, de cuatro cocineros cada uno, y combina pruebas deportivas de aventura y cocina gourmet preparada con equipamiento de campamento. Se computan las diferencias de tiempo en los recorridos y el puntaje que un jurado otorga a la comida preparada por cada equipo.
Valle Encantado es un complejo preparado para desarrollar diversas actividades, casamientos, cumpleaños, encuentros sociales y empresariales, siempre sumados a la excelencia gastronómica.
