Sorprenderse en el mundo de la gastronomía es una de las aventuras mas lindas, mas… si nos preparan una velada especial fuera de casa. Los fines de semana son especiales, las responsabilidades laborales dan tregua y, gustosos de pasarla bien, le abrimos las puertas a las buenas recomendaciones.
Sin romper todas las reglas tradicionales, aceptamos el paso a paso, plato de entrada, principal y postre, lo que no aceptamos, porque así nos acostumbraron en Almazen de Sabores, es aburrirnos con sabores en polvo.
La cosa viene contundente, excelente materia prima y el trabajo de cocineros que marchan la comanda con suma dedicación.
24 cubiertos se preparan para recibir a sus comensales con ensaladas, sopa de la casa, de puerro y papas, con panceta crocante, “delicias caseras para dos”, que incluye paté y frutos secos encurtidos, escabeches, queso marinado, fiambres, chips con curry y pan especiado. También, envoltini de hongos y los mariscos huancainos, preparados con una receta peruana.
Como principales, curry de verduras, pasta “fato in casa”, trucha de la estepa, ojo de bife en su punto, mote de ciervo, bondiola de cerdo braseada y risoto de camarones. Por su parte, entre las pastas se destacan los tortelis de queso de cabra, con berenjenas asadas salteadas con cherys, rúcula y manteca de hierbas.
Todas las combinaciones son armónicas y verán que las presentaciones son características del lugar.
Los postres, torta húmeda de chocolate con frutos rojos, el crumble de manzana y frutos secos con helado o el tatín de manzana con sopa de dulce de leche. Quedará como título de comentarios, una delicia.
El restaurante gourmet diseñado por Lucila Patuel y Franco Ambrosi sin duda creó un estilo propio en gastronomía. El menú de 4 o 5 pasos, propuesto para las cenas, cautivó a residentes y turistas y también la carta de los mediodías, con variedad de platos en estilo vegetariano.
El bistró abrió sus puertas a fines de junio del 2008 en Bariloche y lentamente se ganó un lugar en la buena mesa local. Siempre mantuvo una relación precio-calidad excelente y este fue uno de los secretos para que se difunda de boca en boca de los comensales que se entusiasmaron y lo recomendaron. El hecho de disponer como máximo con 18 sillas hizo que la mayoría de las veces trabajara lleno.
Gabriel Moreyra es parte de la nueva sociedad, ahora en Dina Huapi, sobre calle Las Chilcas esquina Los Radales. La dirección del lugar no es tan complicada, la “recta” de ingreso a Dina Huapi es buena señal. Allí verán un supermercado Todo a la derecha, momento de doblar a la izquierda, cruzar el bulevar, seguir una cuadra y doblar a la derecha otras tres cuadras, justo en la esquina las luces del local son inconfundibles. Previamente pueden reservar a los teléfonos 521109 o 15201302.