Buena nieve y muchos visitantes fueron los ingredientes fundamentales para que la temporada invernal turística pueda definirse como muy positiva. Los turistas coparon la mayoría de los establecimientos de alta gama y también disfrutaron de la excelente gastronomía que tiene la zona cordillerana. Y una buena comida requiere vinos ad hoc, para lo cual la bodega mendocina La Rural dispone de decenas de etiquetas.
Erardo Curcio, Osvaldo Sánchez Salgado y María Fernanda López Lubián, el Drean Team de Rutini en Bariloche.
Los vinos Rutini, de alta gama, posibilitaron que hace más de 15 años Patagonia Norte sea escenario de las Experiencias Rutini Wine, creadas y dirigidas por Osvaldo Sánchez Salgado. Tienen por sede selectas vinotecas, restaurantes y hoteles con propuestas amenas e instructivas, amenizadas por excelentes vinos. Algunas citas incluyen cenas por pasos. Durante el invierno 2022 las acciones comenzaron el lunes 8 de agosto en San Martín de los Andes, con cinco degustaciones, en tres hoteles y las vinotecas El Regional y La Cava de Los Andes. Como es tradicional, la segunda etapa tuvo lugar en la hermosa y sureña localidad neuquina de Villa La Angostura. Las reuniones se llevaron a cabo en La Escondida Casa de Huéspedes, la vinoteca “Dos Tiempos”, Sol Arrayán Hotel & Spa, Tinto Bistró, Calfuco Wine Hotel & Spa, Correntoso Lake & River Hotel y Las Balsas Relais & Châteaux.
En Bariloche se sumó a las reuniones Fernanda López Lubián, sommelier de la bodega, quien junto a Osvaldo deleitaron a los presentes con instructivas referencias sobre los buenos vinos.
La primera velada barilochense tuvo por escenario El Casco Art Hotel, y comenzó con un emotivo homenaje a su propietario y creador, Ignacio “Nacho” Gutiérrez Zaldivar, fallecido el 12 agosto de 2022. Nacho supo participar en numerosas reuniones de Rutini y fue un gran entendido en vinos y gastronomía. No en vano, la cocina de El Casco siempre se caracterizó por su excelencia.
Osvaldo y Nacho, en la reunión de enero 2022.
“Nacho fue un hombre que supo concretar sus sueños” dijo Osvaldo, recordando que entre otras cosas fundo la Academia de Gastronomía Argentina, desde donde trabajó para jerarquizar la buena mesa argentina. También fundo la galería de arte Zurbarán, que permitió conocer a los argentinos el arte realizado por argentinos. Desde sus inicios, el nuevo Casco Art Hotel, lució en sus paredes decenas de obras de arte, que decoran sus pasillos y cuartos.
Los calamarettis grillados estuvieron fantásticos.
En primer término se sirvió el Dominio Rutini Extra Brut, delicioso vino espumoso, que en la mesa fue acompañado por calamarattis grillados, cremoso de batatas, alcaucil sous vide, chip de tomate cherry y aceite de langostinos.
Visión Gourmet tuvo el gusto de poder compartir la mesa con Sandra y Erardo Curcio.
Osvaldo y Fernanda recordaron a los presentes los aspectos salientes de la elaboración de los vinos espumosos, denominados champan en la región homónima de Francia. En Argentina inicialmente también se comercializaban como champan, luego como vinos espumantes y actualmente como vinos espumosos, la definición castellana que los describe en forma correcta.
Risotto con salmón, la presentación del primer paso.
El primer paso del menú elaborado por Gabriel Salinas fue un exquisito risotto crocante de clorofila, gravlax de salmón, yogur griego de eneldo y alcaparras fritas. Y fue maridado con un vino fantástico: Rutini Antología 55. Los Antología con vinos únicos, elaborados con uvas seleccionadas por los enólogos que dirige Mariano Di Paola. La presente etiqueta incluye 80% de Chardonnay, 12 % Resling y 8 % Gewurtztraminer. Nos tomamos la botella 1308 (de 5100) con uvas cosechadas en abril de 2009 y una posterior guarda de 15 meses en barricas de roble francés. Un vino fantástico.
Todo buen gourmand debe probar al menos un vino de la colección Antología de Rutini.
El segundo paso fue un pan bao relleno de mollejas, espuma de sésamo, gel de naranja y soja. Fue maridado con el Colección Rutini Cabernet Franc-Malbec. Otro plato muy bien elaborado, con todos los ingredientes en su punto justo.
José y Mercedes compartieron la amena velada en El Casco.
El plato principal incluyo carne de ternera, carrilleras braseadas, cremoso de zapallo cabutia, papines trufados y piñones de araucaria. La carrillera o carrillada es un corte de carne que se extrae de la cara del animal, y es su músculo masticador, es decir, moflete. Esta pieza de casquería, de poco valor hace algunos años, se ha convertido en una delicatesen. Se cocina a fuego lento, resultando un bocado meloso, jugoso y sabroso. Fue acompañado por el Cabernet Sauvignon de Encuentro.
La carrillera braseada fue cocinada en su punto perfecto. Una verdadera delicia.
El menú mereció la aprobación unánime de los presentes. En nuestra mesa recordamos los inicios de la gastronomía impulsada por Ignacio Gutiérrez Zaldivar, quien al abrir el hotel encargó la carta a Fernando Trocca, quien puso al frente de la cocina a Martín Erkekdjian. En 2011 lo sucedió Ana Lucía Arias y a partir del pasado verano el chef ejecutivo es Gabriel Salinas, con 9 años de trabajo en El Casco. En todos los casos la calidad y la línea gastronómica mantuvieron la directriz trazada por Nacho para el establecimiento.
El postre: cremoso de dulce de leche y whisky.
Como postre fue servido un cremoso de dulce de leche y whisky, hojaldre invertido de cacao y helado de maíz. Y también fue muy bien maridado, esta vez con el el Colección Rutini Encabezado de Malbec.
Gabriel Salinas, chef ejecutivo en El Casco.
Las siguientes acciones tuvieron lugar en hotel Alma del Lago Suites & Spa, el hotel Villa Beluno de península San Pedro, la fiambrería “La Pata Negra”, Pire Hue Lodge en Cerro Catedral, el hotel Llao Llao Hotel y la vinoteca Las Barricas.
