La primera fiesta de la cerveza artesanal en Villa La Angostura se extendió a lo largo de una semana e incluyó almuerzos y cenas con platos típicos de cervecería, happy hour de la bebida espumosa, fogones nocturnos, grupos musicales y mucha alegría. No en vano, la cerveza es una de las bebidas ideales para compartir con amigos.
Visión Gourmet participó de la reunión llevada a cabo en el patio cervecero de Epulafquen, la primera cerveza artesanal de Villa La Angostura, elaborada desde el 2001 por Mariana y Diego Sierra.
La planta de elaboración y el pub se emplazan a la vuelta de la casa de Darío Remorino, célebre guía de montaña neuquino, a 1.6 kilómetros de la ruta internacional. El emprendimiento se ubica en medio de un bosque y luce rodeado de naturaleza.
Es sábado. Al atardecer el patio luce magnífico y los árboles y plantas parecieran querer ingresar por los amplios ventanales al salón a tomarse una cerveza. En uno de los boxes pegados a la ventana una pareja disfruta su cerveza acompañada por un “tentempié”, como se denominan en la carta a las tapas. Hay nachos con queso cheddar, brusquetas, palitos de pollo o papas Epulafquen.
En la cocina Fernando y Melina preparan todos los ingredientes para la noche. Se amasaron las prepizzas y el pan casero, se marinaron las salchichas con cerveza, se cocinó el chucrut y un largo etcétera. Romina y Soledad alistaron el salón y colaboraron en todo lo necesario para que al arribar los comensales cada detalle esté a punto. En todas las mesas se podía ver un cartelito que decía “reservada”.
Con Mariana, cervecita de por medio, repasamos los primeros años del emprendimiento, cuando la cerveza artesanal comenzó a elaborarse en Villa La Angostura. Su presentación en sociedad, en la tradicional Fiesta de Los Jardines 2002, resultó un éxito. Y a partir de allí no pararon. Modernizaron y ampliaron su planta de cocción y envasado y también creció la distribución, por numerosos pub y restaurantes de la villa y también en otras ciudades, ya que obtuvieron la certificación nacional. En el verano de 2010 abrieron el patio cervecero.
“Esta noche nos toca ser anfitriones del oktoberfest, y por ello preparamos salchichas marinadas en cerveza Stout, saborizadas y presentadas en forma de brochette y acompañadas por chucrut”, explicó Mariana, anfitriona en el pub.
Otro de los platos típicos de la casa es el goulash con spetzel y los calzones, exquisitos. El napolitano incluye jamón cocido, muzzarella, tomate y aceitunas verdes y el completo de roquefort, verdeo, panceta, queso roquefort, muzzarella y aceitunas negras. También se prepara el vegetariano, con berenjenas y zucchini asados, cebolla, morrón y muzzarella. Y por supuesto salen muchas pizzas, varias de ellas con los nombres de los habitués del lugar.
Las cervezas que elaboran son la Golden Ale (cristal), Pale Ale (roja) Stout e India Pale Ale, en vasos de pinta o media pinta. Son servidas en la barra, que admite tres comensales y frente a la cual se ubica una barrica repleta de maní, a disposición de los visitantes.
Cerca de las 21 el lugar se comenzó a poblar de parroquianos y turistas y Romina y soledad explicaron una y otra vez que “estamos completos, lamentablemente sin reserva no tenemos más lugar”. Sin exagerar, los que se volvieron, podrían llenar otros dos patios cerveceros.
“Este es el templo de la cerveza en Villa La Angostura, por ello vienen tantos fieles”, bromeó uno de los habitúes del lugar, quien tiene su vaso cervecero propio, guardado en una repisa especial del salón. A las 22 todas las sillas estaban ocupadas y hasta había algunos tomando cerveza junto a la barra, de pié, con la esperanza de que alguno parta pronto. Pero no sería así. La fiesta se prolongó y tocó la banda CaraDaNam de Bariloche. Fiesta de la cerveza, la sureña villa neuquina festejó su primera semana oktoberfest.
