“De chico, ningún niño sueña con convertirse en empresario, banquero o funcionario público. Los chicos quieren ser bomberos, guardaparques, deportistas o estrellas de rock. El dinero, el poder y el lujo no son héroes para nadie”, escribieron los creadores de Konna en los individuales que detallan la filosofía del emprendimiento. La misma que los llevó a elaborar su cerveza y que en mayor o menor medida comparten todos los jóvenes que trabajan o dirigen los pubs del nuevo barrio cervecero, emplazado en el centro de Bariloche.
Angel Perticará elabora cerveza desde el 2009 y en primer término compartio un bar céntrico. Posteriormente, en mayo del 2011, abrió su local propio, en Juramento 73 y la cerveza pronto llegó a otros bares de la zona.
Konna, cuyo nombre e imagen es el del perro del dueño, se ofrece solo tirada, en vasos de pinta o media pinta. Ofrecen tres variedades. La rubia, Kölsch, originaria de Colonia, Alemania, se elabora con trigo malteado y se destaca por su aroma y color claro. La roja, India, de color ámbar a cobrizo y un intenso sabor y aroma a lúpulo, se elabora con la tradición inglesa, lo mismo quela Porter, negra oscura, de sabor profundo a malta tostada.
El menú de su brew pub fue diseñado nada menos que por Mauro Trinarolli, cocinero del Llao Llao. Incluye bruschettas, nachos con queso, pizzas y variedad de tablas de fiambres y ahumados. En todos ellos se destaca la presentación, muy gourmet.